[Hubbel Lib.] Cosa de locos (zero)

Mis pasos me llevan a la biblioteca, a un ritmo lento, pues tenía mucho en que pensar esa noche. Vestía una gabardina larga, negra como la noche, una camisa gris y un pantalón de vestir a juego con la gabardina. Desde que me había unido a los Nazari me vestía mejor, me habían dejado cierta impresión cuando los vi en el casino y se me ocurrió que debía estar a la altura. Y como siempre, el revolver al costado del cinto, descansando en su funda nueva. 

- Parece que este es el lugar, ¿aún sigue en su ubicación temporal? Han pasado años desde aquello... - pienso en voz alta, recordando el desastre del Katrina. 

Me adentro en la biblioteca pública y le envió un texto a la loquilla, aunque seguro no tardarían en dar conmigo.

El horario en el que había elegido era poco antes de las nueve. Me adentré en la biblioteca y saludé con un gesto a la recepcionista, mientras recorría la misma sin suerte, pues tan solo veía a una chica haciendo su trabajo. 

Revisé el celular y nada. Sin muchas opciones, me acerqué a la muchacha disimuladamente, yendo de libro en libro, sacando alguno ocasionalmente para darle una hojeada, hasta que estuve cerca de ella. 

- ¿Disculpe, de casualidad conoce al sr. Colville? - pregunté casualmente.

- Y pensar que hay gente que aún no lo ha leído... - negué con la cabeza, fastidiado, como si fuera el autor más famoso del mundo. Tras hacerlo, me retiro a una mesa cualquiera llevando conmigo un par de libros, uno era un instructivo sobre seguridad informática y el otro una ficción policial. 

Me detengo a leer en una de las mesas la novela policial. Al leerlo me preguntaba varias veces que ahora yo en esas situaciones, pues normalmente si no usaba mis poderes me iba mucho peor que al protagonista. Pero era una ficción, claro esta. Por otro lado había elegido esa novela para poder permitirme una distracción y mirar a mi alrededor frecuentemente, en busca de alguna señal de los Malkavian o de cualquiera que me estuviera observando. 

Esta es la última vez que le pido algo a un Malkavian...

Tras concurrida una hora, sino pasaba nada alarmante, iría al mostrador a solicitar llevarme el libro sobre informática para estudiar en mi tiempo libre.

- ¿Nerviosa? Parece su primer día. - comenté levantando una ceja, el asunto este de la espera y que no se presente Colville me tenía bastante desconfiado.

Sospechoso... muy sospechoso...

- Si hay algún problema, dígalo ahora mismo. - le ordeno, rozando la intimidación. Me estaban haciendo perder el tiempo o incluso tendiendo una emboscada, y la mocosa no me tenía muy contento desde mi llegada a la ciudad.

Mesmerismo:
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